¿Cómo superar las pruebas físicas Guardia Civil?
Las oposiciones a la Guardia Civil cuentan con una particularidad concreta: además del examen teórico sobre el temario de la oposición, hay muchas otras pruebas que quienes quieran acceder al cuerpo deben superar sí o sí. Y entre las más destacadas están las pruebas físicas, que consisten en la realización de pruebas de velocidad, resistencia, flexiones y natación.
De este modo, superar cada una de estas pruebas se convierte en condición imprescindible para hacerse con una de las plazas que oferta su convocatoria. Y, teniendo esto en cuenta, es frecuente que todos los que quieren entrar al cuerpo acaben haciéndose una misma pregunta: ¿cómo superar las pruebas físicas Guardia Civil?
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Pruebas físicas Guardia Civil: qué tener en cuenta
El propio Instituto Armado ofrece a través de su página web cómo son todas las pruebas físicas a las que hay que hacer frente en la oposición de forma detallada. Sin embargo, a parte de saber cómo son dichas pruebas, también es imprescindible saber cómo prepararlas para superarlas de forma exitosa.
Lo primero que debes tener en cuenta en este sentido es que las pruebas físicas son una parte tan importante como el resto de pruebas de la oposición. ¿Con esto qué queremos decirte? Pues que al igual que pasarás mucho tiempo trabajando el temario, también deberías hacer lo propio con la preparación de las pruebas físicas.
Aclarado este punto, lo ideal es que busques ayuda de un profesional para preparar esta parte de la oposición desde el principio. De este modo contarás con un entrenador que te ayude a planificar tus sesiones de entrenamiento para llegar a la prueba con garantías de éxito. Además, es importante que planifiques tu preparación en base a tus necesidades personales, ya que no todas las pruebas se te darán igual de bien.
Te contamos que rutinas de entrenamiento son las más adecuadas
Ahora que ya sabes qué tener en cuenta sobre las pruebas físicas Guardia Civil, llega el momento clave de esta publicación: darte a conocer algunas rutinas de entrenamiento que te ayudarán a alcanzar el siguiente nivel. Y como cada prueba cuenta con sus propios requisitos, técnicas y estrategias de preparación, las abordaremos de manera individualizada a continuación.
Prueba de velocidad
Esta prueba consiste en la realización de un circuito de agilidad en el menor tiempo posible, por lo que lo ideal es que entrenes tu agilidad y tu velocidad. Por un lado, haz ejercicios que mejoren tu capacidad de equilibrio, coordinación y cambio de dirección. Además, trabaja carreras cortas de velocidad máxima, arranques rápidos y cambios de ritmo que te ayuden a mejorar tu explosividad.
Prueba de resistencia
La preparación de esta prueba es más sencilla y bastará con empezar trabajando distancias cortas e ir incrementándolas gradualmente hasta llegar a la distancia de la prueba. Además de esto, también es buena idea entrenar por intervalos, con periodos de alta intensidad, seguidos de periodos de recuperación. Y si incorporas ejercicios que fortalezcan tus piernas como las sentadillas, todo te resultará más fácil.
Prueba de flexiones
El entrenamiento de esta prueba debe centrarse en realizar ejercicios que trabajen el pecho, hombros y tríceps. Debes procurar tener una buena técnica y asegurarte de mantener el cuerpo bien alineado en todo momento. Puedes hacer series de flexiones incrementando poco a poco el número de repeticiones que realizas.
Prueba de natación
Es posible que tu técnica de natación no esté perfeccionada, así que lo primero que deberías hacer aquí es depurarla para conseguir un estilo de natación más eficiente. Fortalece los músculos del tren superior y practica ejercicios de respiración para aumentar tu capacidad pulmonar. Además, nada e incrementa progresivamente la distancia recorrida en cada sesión, procurando mantener un ritmo constante.