¿Qué debo tener en cuenta para la entrevista personal?
A los que hayan llegado hasta la fase de entrevista personal, enhorabuena, estáis a un paso de poder entrar en la Escuela de Ávila y comenzar vuestro sueño: ser policía nacional.
Pero aún no se puede cantar victoria, porque todos conocemos a gente que ha sido declarado no apto en la entrevista, gente a la que calificamos como “normal”, entonces ¿Cómo es posible que haya suspendido? y lo que es más, suspende uno o dos años, y al segundo o tercero va y la pasa y acaba siendo policía.
¿Por qué digo todo esto? Porque pese a los esfuerzos realizados para llegar hasta aquí, falta un último paso: la entrevista personal.
Entrevista personal: Paso a paso
La entrevista se puede decir que comienza al entrar en la sede donde se va a realizar, por ejemplo Madrid, donde iréis la mayoría, puntualidad, apariencia apropiada, y cerciorarse de llevar toda la documentación que se haya solicitado para ese día. Debéis atender las indicaciones de los policías y seguirlas al pie de la letra. No dudéis de que cualquier comportamiento inapropiado será comunicado al Tribunal.
Os indicarán que se realizará en un despacho y tendréis que esperar fuera hasta que os digan que podéis entrar. Habrá una silla al lado de la puerta, y está para sentarse obviamente, pero los nervios, y que como mucho estaréis diez minutos esperando, hacen que la mayoría espere de pie.
Os dirán que entréis, a continuación el saludo, quizás alguna pregunta rápida y os invitarán a sentaros.
Suelen ser dos o tres entrevistadores, uno especializado en psicología que puede ser externo o del CNP, y otro u otros que indagarán en cuestiones más policiales, desde organigrama hasta supuestos de qué haríais en determinadas situaciones.
Como sabéis, tienen acceso al biodata, test de personalidad y vida laboral, con eso intentarán hacerse una composición de quién sois y de por dónde podrían ir para ver si flaqueas en esos puntos.
Durante la entrevista
La entrevista puede ser perfectamente agresiva con la intención de sacaros de vuestras casillas, búsqueda de contradicciones planteando lo mismo de distintas maneras o tratando de que rectifiquéis lo ya dicho anteriormente.
Es importante saber mantener la calma, en la entrevista y en vuestro futuro policial, la mayoría de los opositores opta por una postura relajada, espalda recta, manos sobre las rodillas para evitar gestos que distraigan la atención, y sinceridad.
Esto último es lo más importante, ¿gran variedad de trabajos? no os acababais de encontrar a gusto en ninguno, ¿haréis lo mismo una vez entréis en la DGP? pues se responde con sinceridad, que sabéis que el rango de posibilidades laborales es amplísimo, y que intentéis buscar lo que más os guste, y donde caigáis lo haréis lo mejor posible.
Respecto a los supuestos “policiales”, sentido común, aún no sois policías, claro que queréis ayudar en lo que podáis, pero eso se consigue con una llamada al 091 dando una explicación de lo que ocurre e incluso realizando un seguimiento con seguridad, pero no exponiéndose a un peligro innecesario, no sois policías. En Ávila sí recibiréis formación, y en las prácticas, e incluso una vez jurados seguiréis siempre preparándoos. En todo caso, primero el ciudadano o las víctimas, nada de ir a por el “malo”, para eso siempre hay tiempo.
El consejo que cualquier profesional os dirá es que no se os ocurra mentir, saben más de lo que creemos, llevan tiempo haciendo este tipo de entrevistas y saben cómo preguntar varias veces lo mismo para buscar incongruencias que pueden echar al traste todo el esfuerzo hasta haber llegado a ese punto.
Sí podéis tener preparadas respuestas convincentes sobre vuestros puntos débiles, si sois demasiado jóvenes, demasiado mayores, si casi no habéis trabajado, si habéis cambiado casi cada año de trabajo, las razones por las cuales queréis ser policías, cualquier pregunta adicional, sentido común, la entrevista se graba y las leyendas de peticiones absurdas ya son historia, os pueden tratar con dureza pero siempre con respeto.
Sinceridad y sentido común, con estas dos cosas, estáis dentro.